Abeja azul
Orden: Himenópteros.
Familia: Ápidos.
Especie: Xylocopa violacea.
Longitud: 2-3 cm.
Distribución: Europa central y meridional.
Lugar: en los dinteles y el armazón de las casa, en el campo y las afueras.
Periodo: en primavera y en verano.
Descripción: es la abeja solitaria más grande de nuestras regiones, destacable por los reflejos metálicos de color azul violáceo de su abdomen, las alas ahumadas y el vuelo ruidoso.
Biología: la hembra establece el nido en primavera en la madera muerta, excavándole con sus robustas mandíbulas. Acumula una pasta de polen y néctar para su larva en cada celda y cierra el nido con el tapón de virutas de madera aglutinadas con saliva.
Problemas: los agujeros que excava la abeja azul de la madera superan ampliamente 1 cm diámetro, son impresionantes. Es incapaz de atacar la madera seca y sana, demasiado dura, así que excava la madera ya atacada por los hongos, cuya resistencia mecánica está disminuida. Su presencia es pues útil y no dañina porque indica las piezas de madera de construcción enfermas, que hay que cambiar rápidamente. Matarla no cambia nada, puesto que son los hongos y, probablemente una falta de estanqueidad del tejado, los responsables del problema que pone de manifiesto su presencia. A pesar de su gran tamaño, la abeja azul de la madera es muy pacífica y sólo pica si se coge con los dedos.
Soluciones: la sustitución de las piezas de madera excavadas por la abeja azul suprime los sitios favorables para la nidificación y desaparece por sí misma de la casa, a menos que tenga en su disposición galerías de un diámetro adecuado, agujeros de clavijas en madera reutilizada, por ejemplo, para establecer sus celdas. Pero en este caso no causa ningún daño ni ninguna molestia.