Tábanos
Tábanos.
Los tábanos son los insectos que se hace notar por los hábitos chupadores de sangre de las hembras. No hay ninguna de tamaño muy pequeño, habiendo pocas que sean menores que la mosca doméstica común y siendo algunas muy grandes y robustas, de más de 2,5 cm de largo. Las piezas bucales forman un corto y potente aparato perforador capaz de penetrar epidermis bastante duras y de causar una herida de la que brota la sangre, que el insecto lame después. Las picaduras de muchas especies son bastante dolorosas y pueden ahuyentar a los seres humanos y a los animales domésticos y silvestres lejos de las áreas en que abundan.
Las especies del género Tábanus son en su mayoría grandes, de un matiz castaño o negruzco con las alas transparentes o ahumadas.
Las del Chrysops, llamadas a veces “moscas ciervas” o “moscas alce”, se caracterizan por franjas o manchas oscuras en las alas, son de menos tamaño, pero compensan esta desventaja con su número y obstinación. Las especies de tamaño mediano propio del género Haemotopota, son otras serias plagas en muchas regiones de Europa.
Las larvas hacen eclosión de grandes masa de huevos puestos sobre hojas o tallos de plantas en sitios cenagosos o húmedos, caen al suelo y excavan madrigueras en el barro o en tierra blanda. Son carnívoras, devorando pequeños lombrices, otras larvas de insectos, etc. Las pupas son marcadamente alargadas y cilíndricas.
Los ojos compuestos de los tábanos son muy prominentes especialmente los de los machos que ocupan la mayor parte de la cabeza.
Pocos tábanos son portadores de enfermedades humanas, pero algunas especies transmiten la fiebre de los conejos (tularemia) y una especie de oeste africano es vector de gusano filaríano que causa las dolorosas tumefacciones de Calabar.