Rata gris
Rata parda o gris.
Orden: Roedores.
Familia: Múridos.
Especie: Rattus norvegicus.
Descripción: las orejas más pequeñas y peludas, los ojos más pequeños, la cola más corta, el pelo gris -pardo en la espalda y gris blanquecino en el vientre permiten distinguirla de su prima la rata negra.
Biología: es omnívora, se alimenta de vegetales y pequeñas presas, pero también de restos y cadáveres. Prefiere los lugares húmedos; es la rata de alcantarilla, que coloniza las canalizaciones, los sótanos y los pisos bajos de las casas, pero se adapta fácilmente y puede proliferar tanto en los desvanes como en almacenes. Es originaria de Asia central y llegó a nuestro continente a lo largo del siglo XVIII, desplazando progresivamente a la rata negra.
Problemas: abunda en todas partes donde una higiene deficiente le proporciona comida: basureros, cloacas urbanas, silos en el campo. Es capaz de roer el metal y el hormigón, y puede causar daños importantes. Degrada tanto los productos alimentarios, que consume y ensucia, como los edificios, que ensucia y roe.
Su presencia puede no detectarse inmediatamente, porque no forzosamente hace el nido donde se alimenta y causa los daños. Es agresiva y puede ser peligrosa para las personas y los animales domésticos. Si se siente acorralada muerde fácilmente y puede transmitir numerosas enfermedades. Como la rata negra, es un verdadero almacén de microbios, que pueden pasar al ser humano o al animales domésticos por medio de las pulgas. Pero, en ciertos aspectos, son beneficiosas: la limpieza de los cloacas y la recogida de basura debería multiplicarse por dos en las grandes ciudades modernas si no devorarán tantos residuos.
Soluciones: La prevención es una medida indispensable. Dadas las destacables capacidades del animal para roer el metal o el hormigón, hay que utilizar un enrejado y placas metálicas gruesas que aguanten bien y colocar montones de cristal en el cemento destinado a tapar los agujeros que utiliza.
Los sistemas modernos de contenedores de basura, impiden que acceda a los residuos. Generalmente, todos los residuos y otros cadáveres susceptibles de alimentarla deben evacuarse lo más deprisa posible de los inmuebles y las casas o de sus alrededores. Cuando las ratas se establecen, hay que cogerlas en trampas o envenenarlas. La ratonera con resorte se coloca de forma perpendicular a la pared, con el cebo contra la misma, porque las ratas, como la mayoría de los roedores, se desplazan rozando las paredes en lugar de cruzar la habitación. Sólo son eficaces sobre algunos individuos. Los demás, al ver los cadáveres, desconfían muy deprisa y las evitan.
Los únicos venenos eficaces son los de acción lenta, que desencadenan la muerte mucho después de comerlos. Para evitar que los animales domésticos o salvajes ingieran los cebos, estos deben colocarse en postes de cebado y cambiarse regularmente o retirarse si no son consumidos.
